Klaas Wijnsma y la poesía de Santiago Montobbio en Antiquariaat Das Gute ist immer da! (Deventer, Países Bajos, 3 de febrero de 2016)


Klaas Wijnsma en la silla de Das Gute. Foto: Karin Kwa


El acto celebrado por Klaas Wijnsma, traductor de la poesía de Santiago Montobbio al holandés, en Antiquariaat Das Gute ist immer da! en Deventer el 3 de febrero -hubo cambio de fecha a última hora- fue un rotundo éxito, ya que a los asistentes les agradó el esquema con que estaba planteado y hubo mucha participación, muchas preguntas y muy acertadas. Klaas Wijnsma habló sobre cuatro temas, ilustrados por la lectura de poemas que se pueden encuadrar en ellos: 1. Introducción/presentación del poeta Montobbio: lectura de los poemas “Es una lástima que no me hagan entrevistas”, “En tal tarea”, “Fragmento”. 2. Sobre el nacimiento del poeta: “Acqua alle corde”, “Manifiesto inicial del humanista”, “Póstumo”. 3: Sobre el trabajo del poeta, el escribir: “Poética”, “Ex libris”, “Hospital de Inocentes”. 4. Sobre Dios: “Para una teología del insomnio”, “¿Fábula y signo?”, “El teólogo disidente”.

Las personas que asistieron a la presentación de la poesía de Santiago Montobbio en la Biblioteca de Deventer en noviembre, presentación que realizaron Klaas Wijnsma y el propio poeta, preguntaron a Klaas Wijnsma, al ser la selección que había realizado bastante honda y difícil, dónde estaban los poemas más ligeros que también habían oído. Tenían razón en su observación, como sabían ellos y también Klaas Wijnsma, y por ello, para remediar este asunto y completar la visión de la poesía de Santiago Montobbio con otros aspectos que también hay en ella y por los que se le preguntaba, leyó al final algunos poemas más: “Canción”, “Los trabajos y los días”, “Estampa relativa a mis tardes de domingo” y “Una mujer”. Los asistentes preguntaron si había poemas sobre la situación familiar, y Klaas Wijnsma leyó “Sólo un nombre podría llevar la dedicatoria”. Leyó también “La principal tarea”, porque es un poema que muestra el logro y la dificultad de la solución encontrada en su traducción al holandés, una dificultad que se convierte en acierto. Klaas Wijnsma leyó también un poema a petición del público, que lo recordaba de la anterior ocasión en que se había presentado la poesía del poeta barcelonés en Deventer: “Mejor hubiera sido no haber ido”. Hubo, pues, un interés muy grande por la poesía del poeta, en la que los asistentes ya habían entrado y de la que participan. Se interesaron asimismo por la próxima publicación del libro Desde mi ventana oscura/Vanjuit mijn donkere raam en Deventer Universitaire Pers, una antología de la poesía de juventud de Santiago Montobbio en edición bilingüe castellano-holandés.

Klaas Wijnsma y Jan Praastink Wessels de Das Gute

Santiago Montobbio

Santiago Montobbio
Foto: Anna Xalabarder

Volvió a escribir

después de 20 años de silencio. Entonces Ernesto Sábato, Miguel Delibes, Juan Carlos Onetti y Camilo José Cela describieron su poesía como honda, misteriosa, envidiable.
Es Santiago Montobbio (Barcelona, 1966) de esa estirpe de poetas que cosechan el misterio en la cotidianeidad, que se transportan con ligereza a ese otro lado donde está la sombra alumbrada y vuelve sembrado de palabras tan sencillas como poderosas, tan sobrenaturales como humanas.
(María García Esperón)